Probablemente hayas oído la expresión “como gata en celo”, pero ¿qué significa?
El "celo" es el momento en el que los felinos son fértiles y están listos para aparearse. El primer celo de un felino ocurre cuando alcanza la adolescencia, entre los 6 y los 10 meses de edad. Su ciclo de celo generalmente dura de 4 a 5 días y, a menos que quede embarazada, sin duda volverá a estar en celo en un par de semanas, de manera muy similar a la menstruación en los humanos.
Explicación del ciclo de celo de los gatos
Las gatas sin duda pasarán por el ciclo de celo natural, a menos que hayan sido esterilizadas o estén embarazadas. Esto también se conoce como ciclo estral. Durante este tiempo, una gata es capaz de reproducirse. Es decir, reproducirse y tener gatitos.
Si tu gata no ha sido esterilizada, se comportará de forma diferente cuando esté en celo. Presta atención a estos signos de celo en tu gata:
1. Ella es más vocal de lo habitual.
Tu gata puede gemir, gemir o maullar más de lo habitual cuando está en celo. Sus sollozos también pueden sonar preocupados e incluso pueden mantenerte despierto por la noche. Si tienes una gata que suele ser ruidosa, busca otros indicadores que te ayuden a identificar si está en celo.
2. Afecto adicional
Puede frotarse contra los muebles, las entradas y, en particular, contra las articulaciones de los tobillos para esparcir su fragancia, que ha cambiado sutilmente durante este ciclo. Si su gato no suele mostrarse cariñoso, este es un buen indicador.
3. Ella está agitada
Parece que tu gato no puede relajarse, especialmente si este comportamiento va acompañado de un tono más vocal.
4. Un gateo bajo
Tu gata gatea (y gime) cuando está en celo. Este es un comportamiento estral normal y no es un indicador de que tu gata esté incómoda.
5. Tu gato desea estar afuera
Si tu gata está en celo, es posible que quiera salir a pasear para esparcir su olor. También puede que quiera conocer a un macho receptivo. Si tienes una puerta para gatos, asegúrate de cerrarla para que no pueda salir (y para que otros felinos no puedan entrar).
6. Su cola cuenta una historia.
Es posible que tu gato levante el trasero y mueva la cola hacia un lado.
7. Aseo extremo
Durante este tiempo, es probable que los genitales de tu gato estén hinchados, lo que le causa incomodidad. Por eso, es posible que notes que se acicala más.
8. Marcando su territorio
Una gata en celo, al igual que un gato macho, puede rociar superficies verticales con orina. Para ello, retrocederá hasta la superficie que elija, levantará su cola temblorosa e incluso puede realizar el movimiento rítmico de pisadas descrito anteriormente. Para el ojo inexperto, esto parece una señal de angustia. No se alarme, ya que este es un comportamiento normal en una gata en celo (aunque puede resultar molesto para usted si valora sus muebles).
Una gata en celo sin duda exigirá más cariño de tu parte. Si quieres evitar este ciclo, debes esterilizarla en un veterinario. Esto también ayuda a eliminar el riesgo de un embarazo no deseado o inesperado.