Los felinos son excelentes para acicalarse solos, pero una zona que no pueden acicalar son las orejas. Saber cómo limpiar las orejas de tu gato es una habilidad vital que los dueños de mascotas deben tomarse el tiempo de aprender. Ser capaz de limpiar las orejas de tu gato en casa también te permite detectar cualquier problema de salud que pueda tener tu gato, como suciedad acumulada, ácaros del oído e infecciones.
Instrucciones para la limpieza de oídos en gatos
La mayoría de los gatos pueden vivir sin limpieza de oídos, pero para los gatos propensos a la acumulación de cera y a las infecciones de oído, es una parte esencial de su higiene.
Comencemos con los suministros que necesitarás
Antes de aprender a limpiar las orejas de tu gato, debes contar con los materiales necesarios. Una vez que comiences, querrás tener todo a tu alcance.
- Almohadillas de algodón, bolitas de algodón o bastoncillos de algodón
- Limpiador de oídos especialmente creado para la limpieza de oídos felinos
- Dependiendo de tu gato, una toalla o manta para envolverlo.
También te sugerimos que consultes con tu veterinario antes de comprar una solución limpiadora para usar en la limpieza de los oídos de tu gato. Los astringentes como el vinagre, el alcohol e incluso el peróxido de hidrógeno pueden dañar los delicados oídos de un gato.
Cómo limpiar las orejas de tu gato
- Coloque al gato en su regazo y sujételo suavemente en ese lugar. Si a su gato no le gustan los mimos, puede usar una toalla para sujetarlo en ese lugar. Agarre a su gato y envuélvalo en una toalla antes de colocarlo en su regazo. Si tiene a alguien que pueda ayudar, puede sujetar a su gato mientras usted le limpia las orejas o viceversa.
- Si tu gato vocaliza o te mira con esos ojos que dicen "¿Qué me estás haciendo?", háblale con suavidad. Utiliza una voz suave y relajante y hazle gestos tranquilizadores. Hazlo durante toda la sesión de limpieza de oídos. También puedes hacerlo después, para que tu gato no asocie la actividad con una interacción negativa.
- Revise las orejas de su gato para ver si tiene ácaros, que aparecen como pequeñas manchas marrones o rojas. Observe si hay inflamación, secreción o acumulación de cera. Tome nota de los malos olores y los problemas relacionados con la piel, como bultos, lesiones, rasguños, etc. Todos ellos pueden ser un signo de una infección de oído. Si estos indicios están presentes, hable con su veterinario lo antes posible para obtener orientación.
- Si las orejas de su felino pasan las pruebas visuales y de olfato, ya está listo para proceder con la limpieza. Retire con cuidado la aleta de la oreja, también llamada pabellón auricular. Si está solo, use una mano para doblar suavemente la aleta hacia atrás y use la otra mano para sostener el recipiente con la solución de limpieza de oídos.
- Sostenga el recipiente con la solución de limpieza de oídos cerca de la oreja de su felino. Sin embargo, evite que las puntas del recipiente toquen la oreja del gato. Si esto sucede, límpielo con alcohol antes de continuar. Esto ayudará a reducir la posibilidad de que se propaguen gérmenes y hongos, que son las causas comunes de las infecciones de oído.
- Coloque cuidadosamente unas gotas de limpiador en cada oído. Masajee suavemente las orejas de su gato, especialmente la parte de la base. Esto es para asegurarse de que los productos lleguen a todos los rincones de la oreja. El limpiador de oídos ayuda a aflojar los residuos, lo que hace que el proceso de eliminación sea menos complicado.
- Tu gato sacudirá la cabeza cuando el limpiador entre en su canal auditivo. Un poco de solución limpiadora de oídos se esparcirá en el proceso. Esto no es un problema. Un poco de líquido limpiador en el pelaje de tu gato no le causará ningún daño.
- Utilice un algodón o una bolita de algodón para limpiar rápidamente los residuos de la oreja de su gato. Recuerde no introducir nada, ni siquiera el dedo, en el canal auditivo de su felino.
- Repita el proceso en la otra oreja. Si, en este punto, su gato ya mordió, detenga la sesión de limpieza y realice la otra limpieza la próxima vez.
Revise las orejas de su gato una vez por semana. Llame a su veterinario si percibe o huele algo fuera de lo normal. A menos que vea signos evidentes de suciedad, no es necesario limpiar las orejas de su felino. Para la mayoría de los gatos, una vez cada varios meses es suficiente.
Infecciones de oído en gatos (otitis externa)
Las infecciones en el conducto auditivo externo o en el oído externo causadas por bacterias y levaduras son más comunes en los perros que en los gatos. Una causa común de esto en los gatos es la infestación por ácaros del oído. Las infecciones de oído pueden causar dolor y malestar en los gatos. Además, los conductos auditivos internos son sensibles.
Ventajas de limpiar las orejas de los gatos
Limpiar las orejas de tu gato no solo es una cuestión de estética, sino que también minimiza el riesgo de infección. Las infecciones de oído pueden ser síntomas de otros problemas de salud, así que no lo pienses dos veces antes de llamar a tu veterinario.
En cualquier tratamiento casero, la seguridad de su gato es de suma importancia. Si no se siente cómodo limpiando las orejas de su gato, comuníquese con su veterinario. Le ayudará a seguir los pasos e incluso puede que le dé algunos tutoriales. Desarrolle su confianza en sí mismo como dueño de un gato y sepa cómo limpiar las orejas de su gato correctamente.
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