Los gatos son muy fáciles de educar para hacer sus necesidades. Saben intuitivamente cómo utilizar la caja de arena. Pero ¿por qué entierran sus desechos?
Los gatos tienen fama de ser mascotas que requieren poco mantenimiento. Una de las razones es que es fácil enseñarles a hacer sus necesidades en el lugar correcto. Reconocen de forma natural cómo utilizar la caja de arena. Todo lo que tienes que hacer es mostrarles dónde está y recordar qué hacer.
Lo mejor de ese gatito al que has estado alimentando con biberón es que, después de colocarlo en una caja de arena con la panza llena por primera vez, inmediatamente comienza a cavar. Está programado para hacerlo y es fantástico.
Esto se debe a que la arena para gatos se parece al baño favorito de los gatos en la naturaleza. Los gatos no son los únicos que tienen este hábito de enterrar sus desechos. Algunos animales que también esconden sus heces son las marmotas, los visones, los armadillos y las comadrejas. En la naturaleza, los gatos cavan un agujero, hacen su tarea y lo esconden después. Puede ser un sistema de supervivencia. Esconder sus desechos también oculta su existencia de posibles depredadores en la naturaleza.
Hábitos de arena para gatos
Curiosamente, las variedades de felinos grandes que no tienen depredadores (leones, tigres y jaguares) no entierran sus heces, sino que las utilizan para reclamar una zona como territorio. Los felinos de menor tamaño entierran sus desechos para mantener a raya a los depredadores y a sus presas desprevenidas.
Los gatos domésticos rara vez marcan su territorio con excrementos. En cambio, marcan su territorio rociando con orina. Sin embargo, rocían en los lados de su territorio y no en la base de la casa. Se cree que lo hacen para protegerse de los parásitos.
Al saber que los gatos intuitivos usan la caja de arena, los dueños de gatos deben darse cuenta de que algo anda mal si no la usan. Esa reacción es esencial. Lea este artículo para obtener algunos consejos sobre dónde colocar correctamente las cajas de arena.
Hábitos extraños con la caja de arena
En algunos casos, los gatos muy pequeños no pueden dominar la caja de arena. Pueden jugar en ella, dormir en ella o rechazarla por completo. Si evitan la caja de arena, puede ser que su madre no haya estado cerca para mostrarles cómo usarla. La caja de arena en sí también puede ser demasiado grande para ellos. Asegúrese de que puedan entrar y salir de la caja de arena por sí solos.
Si su gato no usa la caja de arena:
Si tu gato deja de usar la caja de arena de repente, pide cita con tu veterinario para descartar una causa clínica. Algunas afecciones pueden provocar molestias al orinar o defecar, y tu gato sin duda asociará ese dolor con la caja de arena.
Una vez que haya descartado una posible afección clínica, considere posibles desencadenantes conductuales. Si la ansiedad y los problemas territoriales no son los culpables, tal vez sea la caja en sí. Puede ser demasiado pequeña, demasiado grande o estar sucia.
Algunas señales de que tu gato tiene un problema con la caja de arena:
- Sentado a un lado, dudando en poner los pies en el suelo.
- Sacudiendo sus patas
- Salir después de usar la lata
En algunos casos, no es la caja sino la arena: a los felinos les gusta la arena arenosa y sin olor. El sentido del olfato de un gato también es más poderoso que el nuestro. Lo que a nosotros nos parecen productos con buen olor pueden desanimar a nuestro gato.
Al igual que las personas, los gatos son muy exigentes con sus hábitos de eliminación de desechos y desean un lugar limpio. Aprenda qué les gusta según su comportamiento y ofrézcales lo que quieren.